En la Ciudad Universitaria de Madrid, enfrente de la Escuela de Navales. Lo que se ve abajo a la derecha de color gris es la autopista de la Coruña, aunque el camino es muy bucólico e invita a pasear y oir los pajaritos, la verdad es que lo único que se oye es el ruido insoportable de la autopista. La hora y pico que estuve pintando fue un suplicio de ruidos.
Bueno, bueno...porque lo dices, si no, ni nos enteramos de que por ahí hay una autopista.
ResponderEliminarPrecioso paisaje romántico y relajante otoñal.
Saludos.
No llegue a concerlo, pero por ahi pasaba el tranvía.
ResponderEliminarmenos mal que has logrado filtrar los ruidos y dejarnos solo a los pajaritos.
nunca pintes los ruidos:)
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Cuantas veces he bajado y subido esa cuesta, como siempre deprisa para no llegar tarde a clase o ver a Marta antes.
ResponderEliminarLa has pillado fenomenal.
¡Bravo!. Me transporta a mis años de facultad. A mi primer otoño en Madrid: siento la humedad y el crujir de las hojas. En el recuerdo oigo los pajarillos, no el ruido de los coches.
ResponderEliminarMe encanta este dibujo!!
ResponderEliminarVaya, parece que muchos conoceis el lugar. El otro dia estaba precioso y no me pude resistir.
ResponderEliminarSaludos a todos y gracias por vuestros comentarios.