domingo, 2 de marzo de 2014

DIUSTES



Diustes es un pueblo soriano cobijado bajo un hermoso hayedo. Hay varias rutas senderistas que pasan por sus alrededores. Lugar tranquilo. El día que lo dibujé, típico de otoño, una mujer mayor recogía en un cesto hojas caídas. A veces, nuestro cerebro tiene estas cosas cuando ya está cansado.


3 comentarios:

Ale_ dijo...

Impresionante, ...
¿Recogía las hojas caidas? ! !

¿ Para guardarlas, preciosas; para que no las llevara el viento, para limpiar el mundo, para avivar el fuego, ... para pensar o girar en torno a un recuerdo, ... ?

Qué vértigo !!! : El hermoso (?) gesto poético simbólico misterioso y ,acaso, el drama personal ... de la edad

Gracias,Fernando, por el testimonio,
(y disculpas por mis rollos habituales)




Fernando dijo...

La verdad, me impresionó la anciana. Un acto inútil en un pueblo pequeñísimo ha quedado guardado en un cuaderno. Nunca se sabe lo que puede dar de sí lo inútil. Creo que coger hojas en un día de viento en la calle y dibujar unos edificios en ese mismo día son dos hechos que no se diferencian tanto.

Saludos

Ale_ dijo...

... nosotros también recogemos hojas, en medio del viento !
Caramba, que bonita (profunda) reflexión, ... incluso ésta idea es otra "hoja" en nuestro cesto.
Creo que este caso es una de las metáforas más sugerentes que he pillado en el blog ...
Salud !