El tío me miraba cada dos por tres, y yo en el cercanías, simulando que dibujaba a su vecino y pensando: "al final me mete una galleta, ya verás tu la tontería del dibujito".
¡tonto sería!. Aunque yo me he tenido que bajar del autobús por dibujar a una señora. Le ví la cara y antes de que me dijera algo salí por piernas un par de paradas antes de la mía.
Ha valido la pena arriesgarse.
ResponderEliminar¡tonto sería!. Aunque yo me he tenido que bajar del autobús por dibujar a una señora. Le ví la cara y antes de que me dijera algo salí por piernas un par de paradas antes de la mía.
ResponderEliminarCuántas veces he tenido yo esa sensación de riesgo peligrosísimo. Pues bastantes detalles le has puesto a tu retrato robado...
ResponderEliminarConozco la sensación...en esos casos prefiero dibujar niños que pegan mas flojo
ResponderEliminarmi ventaja es que mis dibujos no se suelen parecer al modelo, pero sí,... a veces...
ResponderEliminarbien dibujado!!
Si a veces da mucho corte
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