Mis colegas de cuadernos y lápices subían al blog sus maravillosos dibujos de esta famosa esquina. Por motivos ajenos a mi voluntad, no pude acompañarles a las quedadas en este lugar. Así que tenía verdadera necesidad de subir a este sitio para dibujar. Puedo afirmar que la envidia me empujó hacia la ventana.
Por fin subí. Era viernes por la tarde y el lugar estaba abarrotado de gente fotografiándose con la ventana detrás. Me senté en la silla más cercana e intenté observar la fantástica vista trazando líneas mientras se enfriaba el té. El té se enfrió tanto que tuve que pedirme un gin tonic para acompañar. Tenía ganas de asesinar (con cariño) a los turistas tapa-vistas. ¡No se quitaban ni espantándolos!
Uff! En dos palabras im presionante! Que trabajo felicidades!!!!!
ResponderEliminarPues se supone que la envidia no trae nada bueno....!PERO NO ES VERDAD!!!!
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ResponderEliminarQué arte, miarma!
ResponderEliminarY ademas has puesto todas las venganas !!! Sera cosa del GynTonic? Rn serio, esta genial!!
ResponderEliminarya sabes que cuando algo no nos gusta se borra de la imagen. Es lo bueno que tiene esto. fantástico.
ResponderEliminar¡Fantástico dibujo!
ResponderEliminar¿ponen turistas de tapa?
ResponderEliminar...feliz cumplimiento de sueño dibujistico, y que dibujes muchos más
Espectacular, Fernando.
ResponderEliminarGracias a todos por meterme el veneno del dibujillo en vena. Sois tod@s muy maj@s, de veras.
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