Después de hacer noche en Budapest, salimos hacia Karcag (el pueblo de mi chica) a unas 2 horas en coche al Este de la capital. Desde mi primera visita quedé fascinado por las curiosas formas de los tejados de sus casas, tan diferentes a los de por aquí. Así que esta vez pese al frio decidí dibujar algunos de ellos, aquí teneis una pequeña muestra.
4 comentarios:
que maravilla!
Molan mazo! Gracias
Son preciosas y originales. Están muy bien dibujadas. Qué suerte haber pasado unos días en Budapest,a pesar del frio, que seguro no habrás notado, estando bien acompañado. No?
queremos más!
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