Bueno, como ya iba siendo hora de otro post, introduzco otra de las atracciones más importantes de Shanghai: el riverside. No es ninguna novedad que Shanghai es una de las ciudades con arquitecturas más curiosas del mundo y está plagada de rascacielos de lo más pintoresco. Precisamente por eso, tampoco resulta sorprendente que tenga un impresionante skyline, sobre todo de cara a Pudong, la parte más nueva.
La zona de Pudong tiene muchos de los edificios más curiosos de la ciudad, entre ellos la famosa Oriental Pearl tower y el palacio de congresos, con su bola del mundo. La otra orilla, aunque algo más clásicota, no se queda corta. Por ejemplo, tenemos uno de mis rascacielos favoritos, a la altura del Chrysler: el de la flor de loto. Además, en esa zona hay varios edificios más antiguos con una iluminación muy acertada (nada que ver con los neones de Pudong y de las zonas más modernas).
Además, la ciudad ha cuidado mucho el paseo fluvial y a partir de la primavera debe ser el único lugar fresquito de la ciudad, además de la fuente del parque frente al museo de la ciudad, que se puede uno meter dentro :P :)
Dos cosas más acerca de atracciones relacionadas con el río: mientras que el crucero circular SI que merece la pena, al menos los de una hora en adelante, el túnel seudogaláctico que cruza el río por debajo es, de acuerdo a todas las opiniones que he oido, una tomadura de pelo total y, en conjunto, bastante hortera.
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