El otro día, hice este dibujo desde la ventana de mi salón. Mientras jugaba con los niños, cogí un folio usado que tenía a mano y uno de esos rotuladores de mi hija Aintziñe (el marrón, que tampoco es plan de desmadrarse). Muchas veces no hace falta gran cosa para dibujar, y así compagino las dos cosas con las que mas disfruto, la familia y el dibujo.
7 comentarios:
Me encanta. Felicidades!
gracias victor!
Aprovecha y disfruta Josu de las vistas y de los niños así es como salen cosas tan chulas como esta.
Muy ágil, atrapas el ambiente y el aire de la montaña.
Se ven las casas, el arbolado y el monte como un único cuerpo mecido por el viento húmedo del norte. Hay frescura y movimiento.
Jo, me resulta muy familiar la escena (en el doble sentido); al final yo terminaba con las plastidecor y las "temperas escolares"; mis hijas con el penbrush y los Fabercastell
Pues me gust a mucho, asi muy suelto
Publicar un comentario