La práctica de la sana costumbre de caminar por la ciudad mirando hacia arriba, hacia las cornisas, puede reportar hallazgos inesperados. Salvado el riesgo de tropezones con baldosas en mal estado, hay detalles insólitos en las alturas ajenos a la agitación que se desarrolla en el plano del suelo, esperando tan solo que la mirada fugaz de un paseante distraído o, más probablemente, de un niño, se pose sobre esos guiños cómplices que los arquitectos dejan a veces en sus creaciones.
En esta ocasión el descubrimiento fue el porqué del apodo que la sabiduría popular atribuye al edificio ubicado en Calle Cisneros nº 6, "La Casa de la Pajarita". Se trata de una construcción de la primera mitad del siglo XX, bastante sobria en cuanto a ornamentación, salvo en el remate de la esquina: un gablete y un mosaico de azulejo con figuras geométricas son los motivos decorativos. Observando con atención, las figuras geométricas toman forma repentinamente: del rompecabezas surgen... dos pajaritas de papel enfrentadas, como una caricatura de los pomposos escudos heráldicos de antaño. La sonrisa en ese momento mágico es inevitable.
Para completar la escena, en el local situado en los bajos subsiste un comercio de los de antaño el asedio implacable de las franquicias. ¡Un punto con personalidad en el centro histórico!
Respecto al uso del singular en el apodo, dado que hay dos pajaritas y no una sola... bueno, los andaluces no pronunciamos las eses finales, ¿no?
10 comentarios:
Luis eres "redondo": Imagen y texto conjugados en plenitud estética y documental.
Agudo análista del "Deco-Kitsch", la "equivalencia heráldica", etc
Que bueno! Nunca me habia fijado! Un 10 al dibujo y al texto! :)
Precioso!
Tu texto evoca tanto como el dibujo, Luis, genial ...
Como siempre, estupendos.
Bellisima doble página. Gran deliquedaza en la composición. Felicidades!!!
precioso estudio. me gusta mucho.
A veces se descubren detalles sorprendentes en la ciudad, ¿no es cierto? ¡Saludos a todos!
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