El otro día, paseando por el paseo del Prado de Madrid, me emocioné, al tiempo que escuchaba una melodia que salia del saxo( instrumento de metal madera, inventado por Adolphe Sax), al ver al perro escuchando a su dueño que sin pedir nada, simplemente una caricia , una palabra, una mirada, nos siguen , acompañan, una verdadera amistad, que todos en general deberiamos aprender, vaya con estos dibujillos mi pequeño homenaje.
2 comentarios:
¡Me gusta bastante!
gracias Gabriel, solo el hecho de que te guste, supera con creces, mi entusiasmo por buscar motivos , seguir trabajando, no somos actores, ellos si que esperan un aplauso, que gratifica todo su esfuerzo y sacrificio por contar una historia, en el fondo nosotros también necesitamos unas palabritas de aliento.
Publicar un comentario