Probablemente su edificio más característico. El Palacio del Parlamento de Bretaña que data del siglo XVII.
Otro edificio, aún más imponente que el anterior es el Palacio de Comercio, del que extraje un detalle. Flanquea la Plaza de la República. Actualmente alberga una central de Correos franceses.
En esta calle, la Rue des Dammes, se encuentra la Oficina de Turismo, donde se puede adquirir un plano de la ciudad. Eso sí, tienes que comprarlo. Estos franceses no regalan nada.
Por último y a al espera de la siguiente entrega, una casa de entramado en la Rue Vasselot, detrás de la plaza de la República. Es una calle no lejos del mercado cubierto donde hay buena oferta hostelera. Vale la pena darse una vuelta por allí. El propio mercado también vale la pena.
En Stillman & Birn gamma series.
2 comentarios:
me encantan a mí esas acuarelillas sin acabar.
Gracias Javier! Sí, tienen su encanto.. :-)
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