jueves, 7 de septiembre de 2017

Lisboa en septiembre


 Recién estrenado el mes de septiembre llegamos a la antigua ciudad de Lisboa un pequeño grupo de Sketchers sevillanos. El día es caluroso y la ciudad está abarrotada de turistas, un espectáculo de ir y venir tranvías y tuc-tucs, entre el estrepitoso tráfico.

En las plazas del centro nacen intricadas redes de autobuses y tranvías que recorren la ciudad, como las venas de un ser vivo que late potente. Lisboa se prepara para el fin de semana.




En el barrio de la Alfama al caer la noche se iluminan sus estrechas calles con alegres locales, tiendas, restaurantes, casas de fado, ..... Desde su altura se pueden ver la miles de lucecitas que componen la ciudad antigua de Lisboa.






Al día siguiente participamos en un fantástico taller que impartió Urumo en el Atelier de Viera da Silva (Fundaçao de Arpad Szenes), organizado por USK Portugal . La Fundación se encuentra en los Jardines de Las Amoreiras. La actual Fundación  fue  una fábrica de seda y a su alrededor creció este encantador barrio obrero.  Sus calles estaban repletitas de moreras ( moreiras) para alimentar a los gusanillos de seda  y de ahí su nombre. También son interesantes el acueducto de las Aguas Livrés y sus torres y el Museo del Agua que se encuentran también en los jardines. Dicen que era el barrio preferido de Pessoa.



Siempre es una alegria encontrarnos con tantos amigos portugueses, fue una jornada muy especial. Aprendimos una barbaridad sobre el bitono, pero sobre todo disfrutamos muchísimo, y es que Alfredo/ Urumo es muy grande y un maestro generoso.
La tarde finalizó  del Barrio Alto hasta Chiado. En el camino encontramos elegantes casas, jardínes como el Botánico, Museo de Ciencias,... Algunas iglesias y monasterios ya reconstruidas como la de Carmo son testigos del transcurrir del tiempo.



El domingo visitamos el Museo Calouste Gulbenkian que atesora una valiosa y cuidada colección de arte. Sus jardínes y entorno también son dignos se visitar.



La jornada la finalizamos con un precioso atardecer sobre el estuario del Tejo en el barrio de Belém, allí despedimos a nuestro Tajo, dónde el río se hace gigante al recibir el mar.



El último día en Lisboa, con mucha pena y con sabor a poco nos despedimos de la ciudad con un dibujo desde los miradores de la Alfama y con la promesa de volver.







No hay comentarios: