Las inclinaciones de estos arbolitos pueden deberse tanto al vendaval como al vandalismo. Es lo malo de ser árbol y que te pongan al lado del mar y en un rincón que cuenta con la inestimable complicidad de la oscuridad.
Prefiero pensar que ha sido cosa del vendaval, del mar y de la falta de luz, a la sombra permanente de esa pared. Luz es precisamente lo que a tí no te ha faltado a la hora de hacer este dibujo...precioso. Un saludo.
Pues cuando iba a escribir tenía en mente las mismísimas palabras de José Luis. Así que me reitero en lo del viento y en que es una acuarela ágil y luminosa. Feliciades!
Gracias por vuestros elogios. De verdad. Estos días de septiembe en las Rías Bajas la luz es todo un espectáculo. Corta con insidia los volúmenes y se derrama arrogante.
3 comentarios:
Prefiero pensar que ha sido cosa del vendaval, del mar y de la falta de luz, a la sombra permanente de esa pared. Luz es precisamente lo que a tí no te ha faltado a la hora de hacer este dibujo...precioso.
Un saludo.
Pues cuando iba a escribir tenía en mente las mismísimas palabras de José Luis. Así que me reitero en lo del viento y en que es una acuarela ágil y luminosa.
Feliciades!
Gracias por vuestros elogios. De verdad. Estos días de septiembe en las Rías Bajas la luz es todo un espectáculo. Corta con insidia los volúmenes y se derrama arrogante.
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