De repente se da cuenta que una de esas cosas que ve todos los días, una antigua chimenea industrial, se ha desmochado, y se aprovecha el atasco matutino para dibujarla, aunque sea para recuerdo.
Suena un poco fatalista, pero...¡esto se cae a trozos!
pluma, algo de grafito, tinta y acuarela
3 comentarios:
No será tu dibujo.
Te eché de menos en Madrid. Te mando el abrazo que te guardaba.
gracias Clara, aun estoy mosqueado, y envidiosillo, por no haber podido veros y dibujar con vosotros.
Otro dibujo maestro de semáforo, qué grande...
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