jueves, 6 de noviembre de 2014

ANDALUCÍA Y OLE, un paseo por Lebrija.

Gracias a Elio Antonio de Nebrija -o de Lebrija-, los andaluces podemos enorgullecernos de hacer saber al mundo que no solo hacemos una buena praxis de la gramática castellana, sino que fuimos los primeros en codificarla y compendiarla por escrito en 1492 en la Gramática castellana. Además de ello, nuestra modalidad lingüística -el Andaluz- es creativa, con identidad, de raza, un cúmulo de virtudes que ha exportado cultura a todos los continentes. La Historia ha dado además a la región andaluza la eterna responsabilidad de ser la puerta por la que han entrado todos las civilizaciones, avances y conocimientos desde hace milenios.

ANTONIO DE NEBRIJA 1441-1522
Lebrija, importante urbe sevillana, tiene entre sus hijos más insignes a este autor humanista que, por si alguien no lo sabe, tiene entre sus haberes la promoción de la imprenta en la Salamanca universitaria del Renacimiento. El primer europeo en pasearse por el río de la Plata fue también un lebrijano, Juan Díaz de Solís.
Iglesia de Santa Mª de la Oliva desde la Pza. del Ayunamiento

Lebrija es un sitio muy salado, y es que aunque se asienta en  tierra seca, estuvo en otro tiempo muy cerca del mar por el que llegaron los mismos fenicios. De todos modos, el 5 de julio de este verano de 2014 no encontré playa donde plantar la sombrilla, pero no es problema; para eso está El Chocazo, que a parte de buena sombra da un vino de quitarse el sombrero. Un sitio puro donde los haya, cante y buen beber, además, si te llevas un tupper de garbanzos te lo comes allí tan a gusto con los vinos de la tierra.

De allí, te puedes encajar en un abrir y cerrar de ojos en la frontal de este bello campanario que sí, se parece a la Giralda de Sevilla, pero no es un minarete almohade reformado. Aquí la intención fue la de imitar al referente sevillano cuando se levantó la torre lebrijana en 1757-1777 a su imagen y semejanza.

A pocos metros, mientras buscaba sombra, me crucé con esta maravilla de callejón, que si ya me recordaba por su forma al de Vejer o al de Arcos, también se le dice de las monjas.

4 comentarios:

Marisa Ortun dijo...

Buena promoción de Lebrija. Me encanta el texto y su combinación -historia-actualidad- y por supuesto los dibujos.

Jonatan Alcina Segura dijo...

Muchas gracias, Marisa!!

Félix Tamayo dijo...

Precioso reportaje Jonatan!. Coincido con Marisa. Cuando hay cosas para contar, y estas se acompañan de tan buenos dibujos, el resultado es un genial artículo.

Santiago Ríos dijo...

Fenomenal dibujo de Nebrija.
Yo estudié en el Colegio Mayor Cisneros de la Universidad de Madrid fenomenal Colegio muy próximo al Nebrija.
Vivan el Cisneros y el Nebrija